Miguel Ángel García-Hernández, de 32 años y originario de México, falleció luego de ser desconectado del soporte vital tras resultar gravemente herido durante un ataque a una oficina del Servicio de Control de Inmigración y Aduanas (ICE) en Dallas, Texas, confirmó la Liga de Ciudadanos Latinoamericanos Unidos (LULAC).

El ataque, perpetrado el pasado 24 de septiembre, fue realizado por Joshua Jahn, un francotirador que disparó desde una terraza cercana y posteriormente se quitó la vida. En el mismo incidente murió Norlan Guzmán-Fuentes, de 37 años, quien falleció mientras era transportado encadenado en un vehículo de ICE tras ser alcanzado por las balas.

García-Hernández residía en Dallas desde hace más de 20 años y se dedicaba a la pintura de casas. Dejó esposa y cinco hijos en espera, informó LULAC.

En el ataque también resultó herido Andrés Bordones Molina, migrante venezolano que trabajaba como repartidor de comida.

El FBI indicó que las investigaciones iniciales apuntan a que el atacante actuó solo y que el rifle utilizado fue adquirido legalmente. Las autoridades continúan con las indagatorias correspondientes.