Torreón, Coahuila, 21 de septiembre de 2025.– Carlos Gurrola Arguijo, trabajador de 47 años conocido como “Papayita”, falleció el pasado 18 de septiembre tras permanecer 19 días hospitalizado por la ingesta de una sustancia tóxica en su lugar de trabajo, la tienda H-E-B Senderos de Torreón. La familia de la víctima señala que el incidente podría estar vinculado a un caso de acoso laboral.

Según relataron los familiares, el 30 de agosto alrededor de las 15:30 horas, Carlos consumió una botella de Electrolit que había dejado cerca de su área de limpieza. Minutos después comenzó a presentar síntomas graves y fue trasladado de urgencia al Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), donde médicos diagnosticaron quemaduras en tráquea, pulmones y vías respiratorias.

La familia sostiene que Carlos era víctima constante de burlas, robos y agresiones por parte de compañeros de trabajo, conductas que habrían sido reportadas en múltiples ocasiones sin recibir respuesta por parte de sus superiores.

El 19 de septiembre, la cadena H-E-B México emitió un comunicado a través de su cuenta oficial en X (antes Twitter), en el que lamentó el fallecimiento y aseguró que el caso está siendo investigado. La empresa agregó que colabora con las autoridades y con Multiservicios Rocasa S.A. de C.V., empresa a la que Carlos estaba subcontratado.

“Reiteramos nuestro compromiso con la transparencia y con todos nuestros clientes”, señaló H-E-B, aunque no detalló si se han tomado medidas concretas dentro de la tienda donde ocurrieron los hechos.

Por su parte, la familia de Carlos presentó una denuncia formal el 3 de septiembre ante la Delegación Laguna I de la Fiscalía General de Coahuila. Además, abrió la página de Facebook “Justicia para Carlos Gurrola Arguijo” para exigir el esclarecimiento del caso y sanciones para los posibles responsables.

La Fiscalía confirmó la apertura de una carpeta de investigación y que ya se han recabado declaraciones de testigos, además de revisar las grabaciones de las cámaras de seguridad del establecimiento. Sin embargo, la botella presuntamente contaminada fue desechada por personal de la tienda, lo que impide determinar con exactitud el tipo de sustancia ingerida.

Las investigaciones continúan, mientras la familia exige justicia y mayores avances en el caso.